Llevo años recomendando insistentemente sobre la importancia primordial de la respiración consciente y el enraizamiento (que algunos llaman anclaje). Cuando se hace REIKI a otra persona y se va a su campo astral, muchas de ellas, están flotando en el espacio y hasta algunas de ellas sus piernas están sin desarrollar o están atadas... Y ese es el primer trabajo que hay que realizar: el enraizamiento a la tierra.
Tiene que ver con el chakra raíz que, su buen funcionamiento, hace que sepamos manejarnos en este mundo; sepamos pisar la tierra con paso firme y seguro. Sepamos desenvolvernos en todos los niveles en el plano material. ¡Cuánta importancia tiene el que no esté bloqueado!
Para empezar, es a través de las plantas de los pies que recogemos la energía telúrica de la Madre Tierra que nos es imprescindible para no perder la alineación y armonización necesaria entre todos los centros energéticos de nuestro cuerpo. Perder esta armonización entre los chakras significaría la desconexión entre el cuerpo físico y el alma.
La falta de enraizamiento crea conflictos en nuestro cuerpo físico y en nuestro cuerpo mental/emocional y es la raíz de todas las enfermedades, como consecuencia del bloqueo de la energía activa.
Verdaderamente, REIKI, es la mejor medicina preventiva, a todos los niveles.
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